Por Danna Martínez
El alcohol es una de las sustancias más utilizadas en los Estados Unidos. Desafortunadamente, también es uno de los peores manejos. Sin embargo, en la actualidad existen múltiples oportunidades de superación y resiliencia de este trastorno.
La ingesta excesiva de alcohol genera un deterioro en el ser humano a nivel físico, mental y social. Las personas que no pueden controlar su consumo de alcohol se denominan alcohólicos.
El alcoholismo es un trastorno causado por el consumo irregular de alcohol. De acuerdo con la Organización de rehabilitación de alcohol, “El trastorno por consumo de alcohol se organiza en tres categorías: leve, moderado y severo. Cada categoría tiene varios síntomas y puede causar efectos secundarios dañinos”.
El uso excesivo de alcohol se debe a varias razones. La propensión genética o simplemente los gustos individuales son algunas de las razones. Sin embargo, en la mayoría de los casos, el consumo de bebidas alcohólicas se debe a la influencia del entorno social.
Algunas señales que le permiten reconocer un problema con el consumo de alcohol son:
- Ansiedad por consumir cualquier tipo de alcohol.
- Incapacidad para dejar de beber
- Pérdida de control.
- Dependencia.
- Priorización del consumo sobre todo lo demás.
No saber cómo regular el consumo de alcohol puede desencadenar graves problemas. La adicción al alcohol puede provocar enfermedades crónicas y problemas de salud. Aquí hay unos ejemplos:
- Alta presión sanguínea.
- Accidentes cardiovasculares.
- Problemas digestivos.
- Pérdida de memoria.
- Hipertensión.
- Fatiga.
- Enfermedad mental.
- Abuso doméstico
- Problemas del sistema nervioso.
- Cáncer de mama, garganta, hígado y colon.
- Problemas de hígado
En cuestión de tiempo, este trastorno puede convertirse en una complicación dentro de las relaciones sociales. Los conflictos familiares, en pareja, e incluso en el ámbito laboral, suelen ser provocados por el consumo excesivo de alcohol por parte de algunas personas.
The “Talk. They Hear You” es una campaña de empoderamiento parental y de caregivers con ánimo de fortalecer la comunicación con los niños acerca de temas como el abuso de alcohol y drogas.
Actualmente, el abuso del alcohol es una de las causas mundiales de aislamiento y problemas económicos.
Los casos de alcoholismo ocurren todos los días en personas de todo el mundo y de todas las edades. Según la Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias (SAMHSA), “Aproximadamente 14,5 millones de personas de 12 años o más tenían un trastorno por consumo de alcohol (2019 NSDUH)”. El alcoholismo no es ajeno a la realidad cotidiana de muchas personas. Todos pueden convertirse en víctimas de este problema. De acuerdo con el Instituto Nacional sobre el Abuso del Alcohol y el Alcoholismo, “Aproximadamente el 10,5 por ciento (7,5 millones) de los niños estadounidenses de 17 años o menos viven con un padre con AUD, según un informe de 2017”.
Algunos pequeños cambios en la rutina pueden ser una iniciativa necesaria para superar el trastorno al consumir alcohol. Por ejemplo, evitando personas o lugares que induzcan a beber. Planifique actividades extracurriculares que no impliquen beber. Buscar ayuda también es una gran opción.
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