por Danna Martínez
“Una creencia que no deja lugar a dudas no es una creencia; es una superstición”. -José Bergamín
El término superstición proviene de la raíz latina superstitio. La palabra en latín implica más sustancialmente los efectos de la buena y mala suerte en nuestras vidas. En el pasado, el término superstitio significaba “algo demasiado bueno para ser verdad”. En este escenario, la gente comenzó a creer en las supersticiones como la razón por la que ocurrieron eventos increíbles.
Además, las supersticiones se convirtieron en parte de una creencia, donde los individuos tienen la oportunidad de alterar su suerte y su destino, ya sea positiva o negativamente. Esta idea fue, al principio, excepcionalmente aclamada. Para muchos, asumir que algo es seguro o incorrecto debido a una razón específica les da una sensación de seguridad y control. En la medida en que las personas pueden lidiar con la incertidumbre y el miedo a lo desconocido. En cuestión de tiempo, varias supersticiones cobraron vida y sentido. Dependiendo de la superstición, sus actos condenarán o harán florecer su futuro.
Estas son algunas de las supersticiones más confiables en todo el mundo:
- Malas supersticiones:
- “Nunca cruce debajo de una escalera”.
- “El viernes 13 es un día de sentencia”.
- “Romper un espejo te dará mala suerte durante siete años”.
- “Dejar caer sal es un mal presagio”.
- “Encontrar un gato negro te traerá mala suerte”.
- Buenas supersticiones:
- “Tener una herradura colgando te dará buena suerte”.
- “Encontrar un trébol de cuatro hojas es un buen augurio”.
- “Si te soplas una pestaña caída y deseas algo, se hará realidad”.
- “Soplar una vela por cada año en tu cumpleaños te dará prosperidad para el año siguiente”.
- “Si una mariquita se sienta en tu mano, tienes buena suerte”.
A pesar de la fuerte creencia en este enfoque, las supersticiones carecen de fundamento razonable. En la mayoría de los casos, las supersticiones atribuyen la responsabilidad a influencias mágicas y sobrenaturales. En consecuencia, las supersticiones son irracionales y, para algunas personas, expectativas injustificadas.
Sin embargo, las supersticiones tienen un propósito y una razón para permanecer latentes. Responder a cosas que normalmente no tienen respuesta es, en varios casos, un alivio. Además, creer en supersticiones nos da la sensación de “control sobre nuestro entorno”.
Estas nociones pueden ser mera coincidencia más que lógica. Sin embargo, diferentes culturas y sus tradiciones han desarrollado la idea de supersticiones a lo largo del tiempo hasta nuestros días. Ésta puede ser una de las razones por las que las supersticiones persisten tanto en nuestra historia como en nuestra vida diaria. Seguir nuestras raíces y creencias culturales nos permite abrazar diferentes ideas consciente e inconscientemente.
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