Por Danna Martínez
La fraternidad, más allá de ser un signo de amistad, es un valor moral y un vínculo que une a las personas. Entre hermanos o familiares existe un vínculo de sangre que los unirá toda la vida. Para quienes son fraternos entre sí, el vínculo se crea a partir de algo más compuesto que la consanguinidad.
La palabra fraternidad proviene del latín frater, que significa hermano. Puede desarrollarse una buena correspondencia o fraternidad entre hermanos o entre quienes se tratan como tales.
La fraternidad es sinónimo de hermandad y amistad. Las fraternidades a menudo están representadas en organizaciones o grupos. Estos grupos buscan una forma de compartir sus gustos e intereses apoyados en valores y principios. Además, los miembros de estos se esfuerzan por ser una hermandad, sin necesidad de ser consanuíneos.
Este principio muestra que los lazos se pueden construir sobre la base de la amistad y los gustos personales. Además de crear unión en las personas, la fraternidad tiene sus raíces en una serie de valores y principios.
Entre ellos se encuentran la confianza, la igualdad y la solidaridad.
Para ahondar más en la fraternidad nos remontamos al contexto de la Revolución Francesa en torno a 1789. Este hecho histórico dejó en todo el mundo lo que sigue siendo su lema o frase representativa, “Liberté, égalité, fraternité”. El significado de fraternité o fraternidad en la revolución francesa era aliar a los hombres como si fueran hermanos. Esta alianza sería uno de los principios más representativos de la lucha por la revolución. La base de la fraternidad fue el respeto a la dignidad de los demás. Es decir, no somos ni más ni menos, por eso debemos estar unidos.
La fraternidad como signo de unión entre los hombres se compone de diferentes características. Éstos son algunos de ellos:
- Apoyarse. Ya sea con la tarea o apoyándolos en un aprieto, el apoyo nunca es demasiado.
- Orientar. Si sabe que un amigo está haciendo algo mal, es imprescindible guiarlo y hablar con él al respecto.
- Compartir. Ya sean cosas materiales, tiempo juntos o ideas, compartir es una gran señal de amistad.
- Motivar. A veces, los seres humanos necesitamos una voz que nos anime a continuar. No es fácil salir de problemas o iniciar proyectos si no tienes la motivación para hacerlo. Ser una voz de aliento no resuelve problemas, pero puede ayudar.
La hermandad entre los seres humanos es fundamental para el progreso. Las relaciones sociales son imposibles de evitar. Qué mejor manera de convivir con los demás que basarse en los valores de la fraternidad.
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